¿Por qué los egipcios no escribieron su historia como los griegos, los romanos o nosotros mismos? No lo hicieron porque su visión del mundo, de la civilización y del hombre se basaba en un principio fundamental: la búsqueda de la sabiduría. Según podemos ver en los textos y los monumentos, esta noción se convierte en el hilo conductor para comprender la duración y la grandeza del Antiguo Egipto. Desde Imhotep, creador de la arquitectura en piedra, hasta Hermes Trimegisto, última expresión de Tot-dios de la sabiduría y el conocimiento-, se descubren veintiocho protagonistas excepcionales, unos ilustres y otros poco conocidos, que encarnaron la civilización egipcia. Faraones, reinas, maestros de obra, escribas, sacerdotes y sacerdotisas nos harán viajar por los siglos y las dinastías del Egipto faraónico. Personajes como Sesostris, Hatshepsut, Akenatón o Seti, pero también un iniciado del tiempo de las pirámides, un sabio de provincias, un príncipe arqueólogo, un escriba rural y un filósofo injustamente encarcelado. Con esta sorprendente galería Christian Jacq propone una lectura nueva, original y muy personal del Egipto faraónico a través de figuras que los egipcios consideraron grandes sabios.
“Toda persona que desea ser padre o ya lo es lo tiene que leer”
Me parece que la autora supo plasmar sus ideas de manera clara y precisa sobre como debemos educar a los hijos en la actualidad
y queda claro que no es con golpes como se puede lograr una educación exitosa para nuestros hijos, siempre va a ser un abuso cuando un padre le pega a sus hijos aunque crea estar haciendo lo correcto ya que los padres somos mas grandes mas fuertes y ellos no tienen manera de defenderse.